Puerto Rico tomó hoy todas las medidas para evitar una catástrofe ante el paso del huracán Irma, que a punto de impactar las Antillas Menores del Caribe alcanzó el nivel máximo de categoría 5, por lo que se pidió la declaración de estado de emergencia.
El gobernador de Puerto Rico, Ricardo Rosselló, ha insistido a la población en la gravedad de un fenómeno, esperado mañana y que hoy impactará pequeñas islas del Caribe, que recuerda a los huracanes Hugo (1989) y Georges (1998), que arrasaron la isla, lo que esta vez se quiere evitar.
Por esa razón, el gobernador solicitó ayudas millonarias a EE.UU. que serán necesarias -en caso de aprobarse- si el huracán Irma impacta directamente Puerto Rico, algunas de cuyas infraestructuras no están en el mejor estado.
Las agencias gubernamentales comenzarán en el plazo de horas a realizar el desalojo de zonas inundables cercanas a la costa, después de advertir a la población de que la Policía intervendrá contra quienes se nieguen a abandonar sus hogares.
El huracán Irma se ha fortalecido ya hasta el nivel 5, el máximo en la escala Saffir-Simpson, con vientos máximos sostenidos a 180 millas por hora (285 km/h), mientras se aproxima a las Antillas Menores y Puerto Rico, según el último parte del Centro Nacional de Huracanes (CNH) de EE.UU.
El director de la estatal Autoridad de Energía Eléctrica, Ricardo Ramos, reconoció que la compañía no está suficientemente preparada para un fenómeno de esta magnitud y que si impacta finalmente de forma directa la isla algunas de sus áreas no recuperarán el servicio de luz durante al menos 3 meses.
Las clases en las escuelas y universidades están suspendidas, los empleados públicos ya están en sus casas y las personas acuden a los supermercados en busca de los últimos víveres.
El Aeropuerto de San Juan está operativo, pero fueron cancelados los vuelos a las islas de las Antillas Menores, si bien los enlaces con Estados Unidos y el resto del mundo se mantienen.
El Departamento de Asuntos del Consumidor (Daco) congeló el precio de los artículos de primera necesidad, gasolina y en general todos los bienes que pueden ser necesarios para sobrellevar un fenómeno de esta magnitud.
El CNH indica en su último parte que el ciclón se desplaza hacia el oeste con una velocidad de traslación de 14 millas por hora (22 km/h) y se espera que mantenga hoy esta trayectoria seguida de un ligero giro hacia el oeste-noroeste esta noche.
El vértice de Irma se moverá cerca o sobre el norte de las Antillas Menores esta noche y temprano en la mañana del miércoles.
Bahamas ha emitido una vigilancia de huracán para sus islas más al sur del archipiélago y hay un aviso de huracán para Antigua, Barbuda, Anguila, Montserrat, San Cristóbal y Nieves, Saba, San Eustaquio y San Martin, San Bartolomé, las Islas Vírgenes británicas y las Islas Vírgenes de EE.UU., además de Puerto Rico.
En Puerto Rico los municipios del norte ha ordenado ya a la población de las áreas costeras que desalojen sus viviendas, ya que se esperan olas de hasta 7 metros (25 pies).
En Bahamas, su primer ministro, Hibert Minnis, dijo que el territorio se prepara para el evento para el que se espera que la Agencia Nacional de Manejo de Emergencias ponga hoy en marcha un plan de acción.
En Antigua y Barbuda su coordinadora de desastres, Tessa Webber, dijo que representantes de la Policía, Bomberos, hospitales y la Cruz Roja ya se han reunido para coordinar la respuesta.
La Agencia para el Manejo de Emergencias en Desastres del Caribe (Cdema, por su sigla en inglés), con base en Barbados, activó el plan regional de respuesta ante la llegada del huracán.
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