El lagarto llamado dragoncito de labios rojos y el búho avetero, especies endémicas de Chiapas, estado del sureste mexicano, están en peligro de extinción y para evitarlo los especialistas de una reserva natural trabajan para conocerlas y preservarlas.
Manuel Aranda, biólogo encargado del Parque Educativo San José, contó los planes que tiene para conservar estas especies, solo dos de entre una docena que están en riesgo de desaparecer en la región.
"Una de las amenazas que tiene este reptil (el dragoncito) es la destrucción de los bosques y la percepción que tiene la gente de ellos; muchas comunidades piensan que son venenosos, los matan. Además está el tráfico ilegal que existe en la zona de Los Altos de Chiapas", apunto el especialista.
"Cada dragoncito tiene cierto precio y (muchos ejemplares) los están vendiendo en la Ciudad de México", añadió.
En los últimos años, el tráfico de especies ha ido en aumento en la capital mexicana y en algunos casos ocurre mediante los envíos de los sistemas de paquetería.
Además de ese mercado negro está la tala desmedida de árboles y el desordenado crecimiento urbano en la región, dos de las principales afectaciones que sufre la especie.
Según Aranda, en los últimos años han trabajado en su estado poblacional para saber cuántas hembras y machos hay en las 16 hectáreas de extensión de la reserva.
Sobre el búho avetero esperan conocer su comportamiento y para ello colocan cajas de diferentes dimensiones en algunos árboles para ver si las aves llegan, se establecen y brindan información.
"El objetivo es conocer toda la historia natural y la biología del búho porque no hay mucho trabajo o muchos estudios sobre el animal", apuntó Aranda.
"Esperamos tener la fortuna de que el búho llegue a habitarla y con eso conocer cómo se comporta, cuándo se aparea, cuántas crías puede tener", agregó.
El parque es una reserva natural de 16 hectáreas ubicada en el municipio chiapaneco de Zinacantán, a unos siete kilómetros de San Cristóbal de Las Casas, y además de las citadas especies se estudian otros 10 organismos endémicos de la región para su supervivencia.
En la reserva, los visitantes pueden observar ejemplares de venado cola blanca y ocelote, entre otras especies que enriquecen la biodiversidad del estado de Chiapas, uno de los que más variedad de flora y fauna poseen.
En 2015 el parque fue declarado estación biológica para el aprovechamiento de la vida silvestre con fines de investigación, conservación y reintroducción de especies. Además, el lugar opera como un centro recreativo en el que se puede observar mamíferos, aves, reptiles, anfibios y plantas.
toca y elige añadir a la pantalla de inicio